jueves, 12 de septiembre de 2013

El petróleo “seguirá siendo nuestro”

El Diario, 12 de septiembre de 2013 Luis Javier Valero Flores Sorprende la ofensiva mediática lanzada por el gobierno para convencernos de las bondades de la reforma energética, con el objetivo central de que no tengamos temor a que la iniciativa privada participe en todas las actividades relacionadas con el petróleo. Pocas biografías, por sí solas, pueden ilustrar claramente los intereses que se defienden y que en muchos de los casos, especialmente en la clase política, chocan con el discurso usado en todas las tribunas. Del mismo modo, ubicando a los operadores de tal y cual acción se puede deducir el rumbo de lo que en el discurso se niega. Rayan en el cinismo. Tal procedimiento sirve, y mucho, cuando de analizar el quehacer de los hombres públicos se trata. La reforma energética propuesta por Enrique Peña Nieto ¿de veras tiene el objetivo de explotar de mejor manera nuestros recursos petroleros, a través de la participación privada y que los beneficios serán para los mexicanos, sin que perdamos la propiedad sobre el petróleo? ¿De veras? Recientemente, tuvimos oportunidad de acceder a los aspectos más importantes de la vida pública reciente de uno de los operadores más importantes de las actuales reformas. Se trata del senador por el PRI, Raúl Cervantes, quien preside la todopoderosa Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales del Senado, la aduana por la que transitan todas las reformas constitucionales y las que impliquen modificaciones a más de una ley de distintos ámbitos del quehacer público. (“El hombre clave de Peña Nieto”, nota de Jenaro Villamil, Proceso 1922, 1/IX/13). La biografía de este hombre estuvo ligada a los chihuahuenses pues fue esposo –brevemente– de Angélica Fuentes, a quien las publicaciones de negocios denominaron como la “Reina del Gas”, por pertenecer a uno de los clanes empresariales gaseros más importantes del continente y cuya sede se ubica en el antiguo Paso del Norte. Fuentes es hija de Valentín Fuentes Varela, fundador del Grupo Imperial; su tío, Miguel Zaragoza Fuentes, es propietario de Hidrogas y de Z Gas. Justamente cuando existía esa relación, en 2007, Cervantes, en su calidad de diputado federal, presentó una iniciativa en la que abogaba por la participación de la iniciativa privada en Pemex, propuesta apoyada por el Consejo Coordinador Empresarial y los magnates del gas. En ella proponía celebrar contratos compartidos en producción y utilidades en materia de exploración y explotación de hidrocarburos, de manera similar a la propuesta de Peña Nieto. También proponía una modificación a la ley orgánica de Pemex para que en el Consejo de Administración de Pemex participara la iniciativa privada y que la empresa abriera hasta el 20 por ciento las acciones a los inversionistas privados. ¡Ah, pero nunca planteó que el petróleo dejara de ser nuestro! Más. Propuso, en aquel año, abrir a la inversión privada la explotación de los yacimientos transfronterizos. Asesor jurídico de poderosos grupos empresariales como la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), de Estrella Blanca (la que le suministra los autobuses de la campaña a los candidatos presidenciales del PRI), la Asociación Mexicana de Gas Natural y la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión, el senador Cervantes jugó un papel clave en la defensa jurídica del candidato Peña Nieto, particularmente en el rechazo de la compra de votos a través de Monex en 2012. Además, defendió ardientemente el punto de vista de Televisa en la discusión de 2006-2007 acerca de la constitucionalidad de la Ley “Televisa”, que se había aprobado para defender los intereses de la empresa monopólica de la televisión mexicana. Cervantes participó también en aquella comisión de la Cámara de Diputados, encargada de investigar las relaciones de Juan Camilo Mouriño –y su empresa, Ivancar– con Pemex. No tardaron mucho, rápidamente exoneraron al entonces secretario de Gobernación del segundo gobierno panista. Contra la creencia generalizada, nuestra entidad está involucrada seriamente en el futuro de los hidrocarburos. Según los estudios realizados por Pemex para promover la inversión privada en la explotación de gas shale en México, en Chihuahua se ubica una de las grandes reservas de ese hidrocarburo. Pero no nos preocupemos, el petróleo (y los demás hidrocarburos) seguirán siendo nuestros… Sí, pero la comercialización y, por supuesto, las ganancias, no. Para garantizar tales propósitos es que tienen, ahí, a hombres como el senador Raúl Cervantes.

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