jueves, 30 de noviembre de 2023

D1, única zona autónoma chihuahuense



El Diario, 30 de noviembre de 2023 

Luis Javier Valero Flores 

Parecería un asunto más de la frivolidad con la que, en ocasiones, se abordan asuntos.

Sin embargo, son de los que, escarbando tantito en la superficie, encarnan una seriedad extrema.

Días atrás, en la exclusiva zona de la ciudad de Chihuahua, -el Distrito 1 (D1)- en la que se asientan algunos de los restaurantes más lujosos de la ciudad, además de varios edificios de departamentos de lujo y hoteles de la más elevada clasificación en los servicios, ocurrió un incidente que muestra la absurda actuación de algunos funcionarios.

Antes, en agosto, un «empresario originario de Cd. Juárez, actualmente radicado en El Paso, Texas, socio mayoritario de empresa de fletes con servicio a todo USA e inversionista de algunos restaurantes ahí en D1» sufrió el ‘atípico’ robo de un costoso reloj, sin que las autoridades le dieran seguimiento a un caso que, de por sí, era escandaloso. (Cita de la carta del empresario Carlos Barraza, de Rubarza, a Marco Bonilla, Omnia, 21/8/23).

Y es que días atrás, una señora, luego de asistir a un gimnasio se encontró con su auto inmovilizado -estacionado «en la vialidad interior denominada Citadela» y una nota en la que le señalaban que, por haberse estacionado en un lugar reservado para autos eléctricos, se le fincaba una multa; en ella le señalaban los datos bancarios necesarios para que le destrabaran el inmovilizador.

Los datos no señalaban dependencia oficial alguna, sino el nombre de una empresa, tampoco el nombre de un funcionario responsable.

La víctima le reclamó a la administradora del lugar y ésta le señaló acerca de la existencia de un supuesto acuerdo con «César Komaba, subsecretario de Movilidad (Policía Vial) de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, y por lo tanto podía aplicar esa infracción dentro de la plaza». (Nota de David Piñón, El Diario de Chihuahua, 18/11/23).

No es todo, el agente de una patrulla de la Policía Vial, a quien pidió ayuda, se la negó alegando, después de «consultar con sus superiores», que «no podía hacer nada por estar en una propiedad privada y no estar contemplada una sanción específica por el lugar en que estaba estacionada». (Ibídem).

Siguió el viacrucis. Intentó presentar una denuncia en la Fiscalía General del Estado. No la aceptaron porque, dijeron, su queja era de tipo civil.

La denuncia que quiso presentar era por «usurpación de funciones oficiales, pues (declaró) ninguna ley faculta a una plaza comercial como Distrito 1 a imponer estas sanciones». (Ibídem).

Ante esos hechos, el subsecretario César Komaba adujo que «la sanción impuesta por la plaza comercial es algo que puede hacer por ser una propiedad privada con sus propias reglas, en las que no interviene la autoridad de vialidad. Sin decir que está bien o que está mal, son las reglas que tiene una propiedad privada”». (Ibídem).

En esa zona del país, los poderosos propietarios, en este caso del estacionamiento, imponen su ley; ya los quisieran como asesores las comunidades que exigen respeto a sus autonomías.

No, no hay, hasta ahora, ninguna zona del territorio nacional, en la que las autoridades oficiales, formales, legalmente facultadas para ejercer las funciones señaladas en las leyes, estén sustraída a ellas.

Sorprenden las afirmaciones del subsecretario, ratificadas en sendas entrevistas radiofónicas, en las estaciones de radio de la capital chihuahuense, porque es uno de los funcionarios cuyo principal tema de trabajo es, precisamente, la aplicación de la ley, ante la cual no hay -no debe haber- excepciones.

Raya en lo absurdo.

Vayamos al extremo: ¿En caso de un homicidio en ese mismo lugar podrá excusarse de aplicar la ley?

O mejor ¿En caso de un accidente vial en ese lugar, dejará que sean los funcionarios de la empresa los que se encarguen del seguimiento, de las infracciones que deben imponerse en esos casos, o deberá actuar conforme a sus facultades y obligaciones?

Parecía un asunto trivial, vaya que no lo es.

Columna de Plata-APCJ: 2008, 2015, 2017, 2022 y 2023

asertodechihuahua@yahoo.com.mx; Blog: luisjaviervalero.blogspot.com 

Twitter: /LJValeroF; Facebook: https://www.facebook.com/ljvalero

Citas hemerográficas: https://www.inpro.com.mx

martes, 28 de noviembre de 2023

Bufalada, pero al revés



Aserto.mx, 28 de noviembre de 2023

Luis Javier Valero Flores 

Como lo sostiene un antiguo militante de la izquierda chihuahuense, fundador de Morena, la enfermedad que ahora asola al partido del gobierno tiene larga data, de cuando López Obrador ascendió a la presidencia de la república y que ahora se agrava.

Esto es, la avalancha de destacados priistas y panistas que están irrumpiendo en el partido fundado por el tabasqueño.

Si de las nueve candidaturas a gobiernos de los estados para el 2024, cinco de ellos fueron destacados militantes-funcionarios-legisladores del PRIAN, lo que ahora estamos observando es una verdadera bufalada cuya causa es solo una: La búsqueda de las candidaturas de Morena para alguna de las posiciones en disputa en las elecciones de junio próximo.

Tienen un aliciente extra: Morena encabeza prácticamente todas las encuestas, en casi todas las posiciones, así que buscan aplicar la antigua y socorrida teoría del «flogisto»: Hacer el mínimo de los esfuerzos, para obtener el máximo de los beneficios.

Si Joaquín Huacho Díaz, candidato de Morena en Yucatán.; Alejandro Armenta, candidato de Morena en Puebla militó en el PRI por 30 años; al igual que Claudia Delgadillo, candidata en Jalisco en el PRI o Alma Alcaraz, candidata de Morena para Guanajuato, militante del PAN de 1996 hasta el 2014, o Eduardo Ramírez, candidato para Chiapas, luego de militar en el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), otros, en Chihuahua, que apenas ayer criticaban al «eterno» candidato de la izquierda, hoy alegremente se inscribieron para que los tomaran en cuenta.

Entre ellos, anoten destacadamente a Héctor «Teto» Murguía, Marco Quezada, (exalcalde de la Ciudad de Chihuahua), Marcelo González Tachiquín (Ex Secretario de Educación con Duarte), Guadalupe Pérez (Ex Presidenta estatal y aspirante en Cuauhtémoc), Otto Valles y Alex Barón, todos ellos hasta hace poco miembros del PRI.

Procedentes del PAN, aunque en distinto momento, aparecieron Miguel La Torre y Miguel Riggs. Y del Verde, Hever Quezada, ex diputado local.

Antes, otro grupo ya se les había adelantado, entre los que contamos a los ex panistas Carlos Borruel, Cruz Pérez Cuéllar; y a los ex priistas, Daniel Murguía, Adriana Terrazas, Carlos Comadurán.

Esto apenas empieza, falta la avalancha de aspirantes a las alcaldías, sindicaturas y regidurías en los municipios más pequeños y eso que Chihuahua no es una de las plazas fuertes del morenismo.

¿De veras habrá alguien, al interior de Morena, que sostenga que su partido es de izquierda?

Columna de Plata-APCJ: 2008, 2015, 2017, 2022 y 2023

asertodechihuahua@yahoo.com.mx; Blog: luisjaviervalero.blogspot.com 

Twitter: /LJValeroF; Facebook: https://www.facebook.com/ljvalero

Citas hemerográficas: https://www.inpro.com.mx

domingo, 26 de noviembre de 2023

Parar la violencia contra las mujeres



El Diario, 26 de noviembre de 2023

Luis Javier Valero Flores  

Además de la incontenible ola de violencia existente en el país desde hace ya varios lustros, el país está inmerso en una verdadera pandemia social: La de la permanente agresión hacia las mujeres.

Cosa no menor es que en El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer la clase política mexicana poco se detiene en este fenómeno, al cual debieran dedicarle el mayor de los esfuerzos y la totalidad de su atención, y todo ello transformarlo en políticas públicas y en crecientes partidas presupuestales, de todos los niveles de gobierno.

No será exagerado sostener que del modo con el que los gobiernos emanados a partir del 2024 aborden este tema dependerá el rumbo de la democracia mexicana.

No se trata de los discursos edulcorados emitidos con motivo de este día, junto con la gran o menor cantidad de eventos efectuados ayer, sino de lo que se haga, no sólo desde los gobiernos, sino desde la sociedad.

Podrá sostenerse válidamente que la influencia del crimen organizado es determinante, tanto en este fenómeno como en otros, igualmente violentos y desmadejadores del entramado social; pero no solo, la pandemia develó la magnitud de la tragedia existente ahí en donde creíamos estar más seguros, estar más seguras, el hogar: 

«ONU: matan al día a 245 mujeres; hogar, el lugar más peligroso. ONU detalla que 133 fallecieron diariamente por la violencia a manos de integrante cercano a la familia, y a escala planetaria 89 mil fueron asesinadas en 2022». (Nota de Inder Bugarin, El Universal, 23/11/23).

Esa cifra es la más alta en décadas, que «contrasta con la tendencia global de homicidios, que en 2022 comenzó a retroceder después del pico de 2021». (Ibídem).

El incremento en el número de víctimas es evidente: «La base de datos de la ONU sobre homicidios intencionales muestra que en 2010 fueron asesinadas 2 mil 418 mujeres en México, para 2017 la cifra aumentó a 3 mil 430 y en 2021 alcanzó su pico, 4 mil». (Ibídem).

En ese reporte se asienta que la complejidad del fenómeno es extrema pues «Los riesgos de violencia de género y feminicidio aumentan a medida que nuestro mundo se ve inmerso en conflictos, emergencias humanitarias, crisis ambientales y económicas y desplazamientos». (Ibídem).

Son cifras que estremecen.

La sola exposición de datos devela la magnitud de la tragedia: «Según los datos oficiales, más de 10 mujeres son asesinadas al día en nuestro país; diariamente 54 mujeres, niñas y adolescentes son víctimas de violación; hay cerca de 12 mil mujeres desaparecidas. Incluso, durante estos cinco años de gobierno, se han contabilizado más de 1 millón de denuncias por violencia familiar. Nunca antes, se había vivido una violencia tan rapaz en México». (Artículo de Kenia López Rabadán,  El Universal, 24/11/23).

La ahora extitular de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), Karla Quintana, informó que se tiene registro de más de 111 mil personas reportadas como desaparecidas en el país. La funcionaria indicó que, de ese total, cerca de 28 mil son mujeres, niñas y adolescentes.

La impunidad campea en todo lo alto en el país. Solo 8 de cada 100 delitos sexuales cometidos se resuelven.

Es estrujante la realidad, ya no sólo la de las mujeres mexicanas, sino del trabajo de las instancias procuradoras de justicia y las administradoras de la justicia, esto es de las fiscalías y el Poder Judicial de todo el país.

De acuerdo con un trabajo auspiciado por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, de las 329 mil víctimas de delitos sexuales denunciados en los últimos diez años, «sólo 28 mil han conseguido una sentencia condenatoria, lo que significa que el 91% permanece en la sombra de la impunidad». (Nota de Valeria Durán y Ami Sosa, MCC, 23/11/23).

Del total de delitos sexuales casi la mitad fueron de violación (145 mil), pero a pesar del número de víctimas denunciantes, en casi una tercera parte de los casos (239 mil 251) no se iniciaron carpetas de investigación y solo «fueron detenidos más de 98 mil sospechosos pero solamente se logró dictar sentencia condenatoria en 28 mil 455 casos, mientras que se registraron tres mil 586 absoluciones». (Ibídem).

Cuando decenas y decenas de miles de mujeres salen a las calles en las fechas emblemáticas, a tratar de sensibilizar a la sociedad y a los gobernantes, tienen tras de sí una inmensa tragedia, sí colectiva, pero sobre todo personal, individual a más no poder, la de la agresión o agresiones sufridas a lo largo de sus vidas.

Es impresionante el halo de impunidad que rodea a estos delitos, lo que convierte a estos crímenes en un verdadero círculo delictivo que tiene a agravarse, también en lo colectivo, no sólo en lo individual.

Sirvan de parámetro el hecho de que para el delito de estupro, solo en el 1.73% de los casos se emitió una sentencia condenatoria irrevocable y a que en el mismo periodo se obtuvo sentencia condenatoria irrevocable solamente en el 11% de los delitos de violación, violación equiparada y violación impropia. 

Detalladas de ese modo las cifras, que revelan, así sea con frialdad la magnitud de la tragedia sufrida por las mujeres, hay otras que nos ilustran nítidamente la profundidad de los niveles de violencia existente en la sociedad, en este caso, de la chihuahuense, inmersa en una aparente oleada violenta que uno podría imaginarse tiene sus momentos críticos, pero que, por el contrario, nos muestran un severo agravamiento del deterioro social. 

Esto queda evidenciado por las extremas características de muchos crímenes perpetrados en la entidad a tal grado que Chihuahua encabeza en el país el número de asesinatos atroces al que aporta el 13% nacional: «… de enero a septiembre de este año; destacan la tortura, homicidios de mujeres con crueldad extrema y violación agravada, Reporte de Causa Común». (Nota de Sandra Rodríguez / El Diario de Juárez, 25/10/23).

Tal clasificación la otorga el hecho de que haya el «uso intencional de la fuerza física para causar muerte, laceración o maltrato extremo», para matar «un alto número de personas», a población vulnerable o de interés político o para «provocar terror». (Ibídem).

Son hechos que debieran llevarnos a hacer mucho más de lo que ahora hacemos pues en esos terribles datos se cuentan «al menos 192 de tortura, 65 asesinatos de mujeres con crueldad extrema y 25 masacres (muerte de tres personas o más en un mismo hecho)». (Ibídem).

Para ponerse a temblar, según Luis Sánchez Díaz, investigador de Causa en Común, quien, al detallar tales crímenes nos lleva a una estrujan realidad pues de esos asesinatos «24 crímenes (fueron) con mutilación o descuartizamiento, 19 personas calcinadas, 16 asesinatos de niños y adolescentes y 28 violaciones agravadas, para un total de 560 víctimas, la cuarta cifra más alta del país». (Ibídem).

No es todo, quizá lo más preocupante es que el investigador sostiene, que «… buena parte de estas atrocidades son perpetradas por personas que no forman parte de organizaciones criminales». (Ibídem).

Nos debe preocupar más porque en esas atrocidades van incluidas la violencia de género, la familiar, la comunitaria y la social, reveladas en el informe de la organización «Atrocidades y eventos de alto impacto enero-septiembre 2023». (Ibídem).

Según la encuesta que abarca de octubre de 2022 a septiembre de este año, un 14.4% de hogares en la ciudad capital reportaron denuncias de violencia en el hogar. Ciudad Juárez y Chihuahua ocupan ocupan el sexto y séptimo lugar a nivel nacional en la presentación de denuncias de violencia intrafamiliar». (Nota de Velvet González, El Heraldo de Chihuahua, 7/8/23).

Todo lo anterior revela que tenemos un verdadero problema social, que nos atañe a todos, que va más allá del arraigo o no de las bandas criminales, que revela con toda crudeza la ausencia de la procuración y aplicación de la justicia; que debiera ser uno de los temas centrales de las propuestas de quienes ahora se desgañitan por mostrarnos su inveterada «voluntad de servicio a la sociedad».

No, mientras no se detenga esta despiadada agresión contra las mujeres, solo por el hecho de serlo; de considerarlas inferiores o que su papel es el de servir a los hombres, o de minimizar sus quejas, peticiones o denuncias, no habrá progreso, ni  régimen democrático.

Más en concreto, mientras no se dé seguimiento a las denuncias de hostigamiento, acoso, violación, golpes, discriminación en contra de ellas, no podremos hablar del desarrollo democrático de la sociedad.

Por ello deberá exigírseles a candidatos y partidos los planes y programas tendientes a cambiar tal entorno, que pudieran iniciar por lo más evidente, el del modo en que las fiscalías reciben y tratan las denuncias.

¿A qué esperar a que nuevamente el 8 de marzo próximo algunas mujeres pierdan el miedo -o tengan menos miedo- para hacer sus denuncias en las paredes de los edificios públicos más emblemáticos?

Solo para ejemplificar lo alejados que se encuentran los gobernantes -de todos los colores, algunos más que otros, obviamente- ahí está el más reciente caso del hombre que asesinó a su ex pareja, a dos semanas de salir de la cárcel, luego de purgar una sentencia del juicio abreviado por agredir a quien fuera su mujer, a quien amenazó matarla, desde entonces.

La víctima había aceptado, para que se efectuara el juicio abreviado, una indemnización de ¡16 mil pesos!.

El fulano purgó la condena y luego cumplió su amenaza.

No hay, en la legislación mexicana, lo necesario para que una institución gubernamental le dé seguimiento a la vida de las personas que purgaron una condena y evalúe si dejaron de ser personas riesgosas para la sociedad o, mejor aún, si lograron insertarse nuevamente en la sociedad.

No hay, tampoco, ni la instancia, ni la autoridad que pudiera ejercer tal papel en el caso de los agresores de mujeres.

Pero tampoco la acción concertada, continuada, permanente, de profundo calado, del Estado Mexicano, de todos los niveles de gobierno, para incidir en esto que es una verdadera pandemia social que debiera afrontarse desde todos los flancos.

Al contrario. 

Los programas destinados a una vida libre de violencia para las mujeres, la salud materna y los programas de INMUJERES representaron menos del 10% del presupuesto total del Anexo de Igualdad de género en el Proyecto del Presupuesto del Egresos de la Federación para este año.

¿Así cómo?

Columna de Plata-APCJ: 2008, 2015, 2017, 2022 y 2023

asertodechihuahua@yahoo.com.mx; Blog: luisjaviervalero.blogspot.com 

Twitter: /LJValeroF; Facebook: https://www.facebook.com/ljvalero

Citas hemerográficas: https://www.inpro.com.mx

jueves, 23 de noviembre de 2023

¿Nos llevará el tren?



El Diario, 23 de noviembre de 2023 

Luis Javier Valero Flores 

La decisión presidencial de impulsar la creación de trenes de pasajeros, a través de la coacción a las empresas concesionarias de las líneas de ferrocarril, a las que les impuso plazos a fin de que presenten los proyectos necesarios que concreten ese objetivo, el establecimiento de 7 rutas, debiera abrir la discusión sobre los proyectos de largo plazo, necesarios para el desarrollo del país y la entidad.

Sí, porque entre las rutas mencionadas por el decreto presidencial, se encuentra la ruta Aguascalientes-Juárez y que en la parte chihuahuense pasaría por Jiménez, Camargo, Delicias y Chihuahua.

A meses del término de la administración federal se antoja, por lo menos tardío, el lanzamiento de tal iniciativa, que debiera concitar una profunda reflexión sobre un tema que requiere una buena cantidad de estudios, que demuestren la viabilidad financiera, el beneficio social y el necesario financiamiento.

Cosa no menor es la definición del proyecto, público, o privado.

Parte esencial de ello lo es si el flujo de pasajeros es el necesario como para que la prestación de ese servicio no fuera a convertirse en un rubro a subsidiar y entonces, en lugar de ser uno que genere beneficios sociales, se convierta en una imparable fuga de recursos públicos que, sin duda, son harto necesarios en otros aspectos de la vida social.

Ahora bien, si fuera un negocio privado, -para lo cual las empresas tendrían que llegar a esa conclusión- entonces, si se dejara en esa categoría, las tarifas tendrían que cumplir dos aspectos, la mayor parte de las veces contradictorios, es decir, la generación de utilidades ‘rentables’ a las empresas, y tarifas reducidas.

Aspecto importantísimo de tales proyectos lo serían las enormes presiones del conjunto de empresas y ramas industriales -además de las estrictamente comerciales de las empresas de transporte de pasajeros- beneficiadas por el tipo de transporte que se privilegió en el país, el del uso de las carreteras, en lugar de las vías férreas, en un país que, por lo menos en la parte central y hasta el norte, es casi ideal para el uso del ferrocarril.

Si, porque las empresas fabricantes de vehículos -automóviles, camionetas y camiones de carga, trailers- llantas, aceites, refacciones; y las relacionadas con la construcción, mantenimiento y rehabilitación de las carreteras, etc. tienen en esta modalidad uno de sus nichos más productivos.

Ahora bien, por las razones anteriores la discusión no puede extenderse a la contienda político-electoral; no puede, por una razón, porque la viabilidad financiera sólo la pueden demostrar los estudios, que no pueden hacerse en el curso de unos cuantos meses.

Para decirlo más adecuadamente: El triunfo o derrota de la candidata del régimen no dependerá de la puesta en marcha, o no, de los trenes de pasajeros.

Más aún, el paso a la historia de López Obrador no lo determinará si se pusieron en marcha esos trenes. 

Para sus apologistas ya está junto a los grandes héroes mexicanos, así que esa es una de las discusiones que no debiéramos hacerla los legos, es decir, la mayoría de la población.

Son los expertos los que deban demostrarle a la sociedad su viabilidad, o no.

Por desgracia, como parece será lo frecuente a partir de ahora, las dos fuerzas políticas más importantes en la entidad ya se enfrascaron en esa discusión.

Por una parte, el Secretario de Gobierno, Santiago de la Peña, de botepronto declaró que «La circulación de trenes de pasajeros en el país facilitará el traslado de migrantes, lo que traerá un mayor desorden en el flujo migratorio…». (Nota de Miguel Ángel Silva, El Diario, 22/11/23).

Ante lo cual, como era de esperarse, la respuesta de los morenistas no tardó.

El Dip. Cuauhtémoc Estrada, líder de los diputados de MORENA, en su respuesta criticó que De la Peña desestimara el uso del tren para pasajeros, «… ahora resulta que las vías que construyó el estado mexicano, solo deben ser utilizadas para el transporte de carga», en un momento, en el mundo, en el que ese tipo de transporte sólo funciona con millonarios subsidios de los gobiernos en donde existe.

Y ya puestos en el terreno de las supuestas ‘ironías’ políticas, Estrada cuestionó a de la Peña, «o sea ¿qué no merecen (los migrantes) un tren de pasajeros?». (Nota de César Lozano, El Diario, 22/11/23).

¡El colmo de las discusiones! Uno se opone porque puede propiciar el crecimiento de la ola migratoria y el otro sale en defensa de esa oleada y que puedan trasladarse en los trenes de pasajeros!

¡Ah, y presentó la solución ‘ideal’ de la 4T!: Si los empresarios no pueden crear ese servicio, «entonces (los) operará el Estado a través de la SEDENA y la MARINA…». (Estrada dixit).

¡Válgame! 

Lo dicho, esos no son temas para la clase política.

Columna de Plata-APCJ: 2008, 2015, 2017, 2022 y 2023

asertodechihuahua@yahoo.com.mx; Blog: luisjaviervalero.blogspot.com 

Twitter: /LJValeroF; Facebook: https://www.facebook.com/ljvalero

Citas hemerográficas: https://www.inpro.com.mx

domingo, 19 de noviembre de 2023

Xóchitl, en desventaja inicial



El Diario, 19 de noviembre de 2023 

Luis Javier Valero Flores 

El día de mañana arrancan formalmente las precampañas presidenciales, luego de que todos las agrupaciones políticas registradas ante el INE han violado permanentemente el marco legal de las elecciones.

No han fallado, tampoco, en esta ocasión. Proceso tras proceso, luego de haber aprobado -en casi todos los casos por unanimidad- nuevas reformas electorales, a continuación, los integrantes de la ‘clase’ política mexicana se dedican resueltamente a buscar los resquicios que les permitan, no solamente violar las nueva regulaciones, sino, fundamentalmente, y ese es el origen, tanto de las reformas, como de las conductas violatorias, obtener ilegales ventajas.

Probablemente no sea una coincidencia -es infrecuente que eso suceda en política- pero la aspirante presidencial de la oposición arrancará su precampaña, al igual que el entonces candidato opositor, Andrés Manuel López Obrador, en Juárez.

Sus motivaciones, al menos las externadas públicamente, son diferentes: En tanto que el tabasqueño dijo que lo hacía en homenaje al presidente Benito Juárez -uno de sus referentes y figuras a emular-; la nacida en Hidalgo dijo que lo hará en homenaje a la lucha de las mujeres y a que en el antiguo Paso del Norte, por desgracia, se inició (por lo menos en magnitudes hasta entonces desconocidas) una de las tragedias que han asolado al país en las últimas tres décadas, los  feminicidios.

A pesar de que podríamos afirmar que se trata del mismo país, en realidad México es, hoy, por lo menos electoralmente hablando, muy diferente al de seis años atrás.

En 2017-2018, el candidato opositor atraía la mayor parte de los reflectores de la escena pública, en tanto que el candidato oficialista arrastraba el descrédito de un gobierno que había concitado las peores calificaciones ciudadanas, a las que se sumaban las despertadas por la mayoría de los gobernadores emanados del PRI.

El partido del viejo régimen, pocos meses después -y a lo largo de todo el sexenio- se sumía en la peor de sus crisis y lo perdía todo a manos de un partido con menos de un lustro de existencia.

En esa vorágine, el tradicional partido de la derecha mexicana caía también, pero no con las magnitudes del PRI.

La política y el régimen de partidos políticos existente hasta entonces sufrió un vuelco y muchos integrantes de la clase política simplemente ampliaron sus horizontes: Aparecía un nuevo ‘nicho’ de oportunidades; una nueva clase gobernante, «urgida» de sus conocimientos, capacidad y experiencia les abriría las puertas del poder político.

Hoy, todo lo anterior forma parte del pasado, por primera vez en la historia, una mujer -con toda probabilidad- se convertirá en presidenta y el país entra al proceso electoral en medio de una tremenda polarización.

Además, la candidata de la oposición no llega representando el rechazo de una mayoría evidente al actual gobierno, como López Obrador en 2006 y 2018, o como Vicente Fox en el 2000.

En cambio, la elección del 2012 tuvo más características de una contienda a tercio mayor.

Pero no son pocos quienes rechazan la continuidad de MORENA al frente del gobierno, al contrario, son una oposición con posibilidades de competir y, eventualmente, de ganar. 

Así lo muestran, no solamente todas las encuestas, sino todas las evidencias, referencias, eventos y manifestaciones que sirven para evaluar, analizar y sopesar cuál será el comportamiento del electorado en la elección presidencial.



Quizá nos sirva como una buena referencia la encuesta publicada por El Universal, el 4 de octubre de 2023, en la que  la exjefa del Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, obtuvo una ventaja de 30 puntos sobre Xóchitl Gálvez a la pregunta de si las elecciones fueran el día de hoy  ¿Por quién votarías?, el 50% se pronunció por la morenista, por 30 de la aliancista.

Sin embargo, al momento de analizar -de ‘ponderar’, que es lo correcto hacer a la hora de calificar los resultados de una encuesta- esos resultados, deberá tomarse en cuenta que la diferencia en la exposición pública entre ambas aspirantes, que lo refleja el dato de «conocimiento», puede convertirse en determinante una vez iniciado las campañas electorales.

Es decir, que Claudia es más conocida y, por tanto, es más fácil que una mayor cantidad de encuestados la consideren  como su primera opción en las preferencias electorales.

Y es más conocida por muy evidentes razones. 

La mayor parte de ellas por haber desplegado una costosa y extendida campaña publicitaria en los meses previos al levantamiento de las encuestas de las ‘corcholatas’ de Morena, además de su muy publicitada -sobre todo por el presidente- estrecha relación con López Obrador.



En cambio, Xóchitl ‘apareció’ en la escena pública cuando se paró a las puertas de Palacio Nacional, al exigirle al presidente el derecho de réplica y anunciar al día siguiente que buscaría la presidencia de la república.

Eso denota la encuesta mencionada líneas arriba, en la que Sheinbaum «mantiene los mismos niveles de reconocimiento de nombre que en junio pasado (68%), pero sus opiniones positivas mostraron un aumento de 5 puntos (50%). En cuanto a Xóchitl Gálvez, su porcentaje de reconocimiento pasó de 43 a 47 puntos …».

Es decir, el nivel de ‘conocimiento’ entre una y otra es de 21 puntos a favor de la morenista y, por lo tanto, deberá preocuparse por elevar ese porcentaje, a sabiendas de que, si lo logra, será mucho más difícil que para la aliancista pues Xóchitl deberá preocuparse en las semanas siguientes porque un mayor número de electores la ‘conozcan’ y, con ello, elevar sus números en las preferencias electorales, metas aparentemente más fáciles de lograr si se toma en cuenta que todavía a mediados de junio pasado era desconocida para la mayoría de los electores.

Ahí hay dos datos que pueden determinar el resultado de la elección presidencial: ¡La candidata opositora no es conocida por más de la mitad del electorado! ¡Y la candidata del régimen, a pesar de la millonaria publicidad, incluso con recursos públicos -de acuerdo, incluso, con la versión de Marcelo Ebrard- no es conocida por 32 de cada 100 electores!!

Así que hacen cuentas alegres quienes, desde el morenismo, creen que la ventaja de su candidata es inalcanzable, más si se toman en cuenta hechos como los mostrados en la encuesta publicada por El Financiero el 31 de octubre en la que las preferencias por los bloques partidarios es de 16 puntos, y no los 30 de la encuesta de El Universal.

En ella, el bloque oficialista logra el 45% de las preferencias, por el 29% de la alianza PAN-PRI-PRD y Movimiento Ciudadano el 5.

La encuesta también señala que el 19% de los encuestados no manifestó ninguna preferencia política.

Cierto, López Obrador no aparecerá en las boletas electorales, pero sin duda será un factor determinante de los resultados; ha hecho de todo para que así sea, incluso las acciones ilegales, entre ellas el uso de los recursos públicos en favor de sus favoritos. 

¿O si no, cómo ubicar la denuncia de Marcelo Ebrard, cuando señaló que desde la Secretaría del Bienestar -es decir, el aprovechamiento de los ‘Servidores de la Nación’- se efectuaron diversas acciones para favorecer a Sheinbaum?

Y si se acusa a la secretaria Ariadna Montiel, siendo subordinada directa del presidente, además de que ésta no efectúa acto político alguno, de importancia mayor, que no sea de la aprobación presidencial.

Así que la candidata opositora tiene razón, cuando sostiene que es «el dolor de cabeza del presidente», preocupado por lo que puede ocurrir en el proceso electoral.

La mala noticia es que no es el único preocupado -y debiéramos hacerlo todos- lo que ha evidenciado la develación de la vasta maniobra de espionaje político descubierta en la CdMx en contra de los aspirantes opositores a la jefatura de gobierno, especialmente en contra de quien ha sido designado como el candidato de la oposición, Santiago Taboada.

¿Explicará algo de eso la pretensión de llevar como candidato en la capital del país a Omar García Harfush, y por fortuna hoy anulada, cuya trayectoria ha sido exclusivamente en las tareas policiales?

No se puede cerrar la página de hoy sin comentar el lamentable papel del gobernador de Nuevo León, Samuel García, y de su dirigente, Dante Delgado, en el esfuerzo de «ayudarle» al presidente en las elecciones presidenciales.

Samuel y su equipo han llegado al extremo de amenazar con el uso de la policía para imponer a su Secretario de Gobierno como gobernador interino, en una clara violación a todo el marco legal.

¡No me vengan con eso de que la ley, es la ley!

Columna de Plata-APCJ: 2008, 2015, 2017, 2022 y 2023

asertodechihuahua@yahoo.com.mx; Blog: luisjaviervalero.blogspot.com 

Twitter: /LJValeroF; Facebook: https://www.facebook.com/ljvalero

Citas hemerográficas: https://www.inpro.com.mx