Retrato emblemático
El Diario, 29 de octubre de 2015 Luis Javier Valero Flores Pocas veces un caso puede ilustrar tan nítidamente al todo. Tal premisa aplica, evidentemente, a la clase política. No todos sus integrantes “gozan” de estas características, pero de que se les puede aplicar como clase -aunque al Profe Isaías Orozco no le gusta tal clasificación, y tiene razón, aunque para ilustrar es muy útil-, como casta o como una capa social, por supuesto, sí. Lo que los une, con sus excepciones, claro está, es la ambición por ocupar un lugar en los puestos del poder, con todas las ventajas que implica, empezando, pero por supuesto, con los ingresos económicos. No falla, cada que se le pregunta a uno de ellos a cuánto ascienden sus ingresos como servidores públicos, alegan no saberlo o, en el mejor de los casos, dan una cifra aproximada… Y si se les pide que hagan públicas sus declaraciones patrimoniales, voltean a ver al preguntón como si fuera de otro planeta. Bueno, pues el martes la diputad...